Esta encantadora propiedad, ubicada en el histórico pueblo de Aripe, es ideal para los amantes de la naturaleza y quienes buscan una casa típica canaria. Aripe forma parte del patrimonio histórico de las Islas Canarias y cuenta con varios edificios de gran valor histórico, etnográfico y arquitectónico.
La propiedad, que se extiende sobre casi 3.000 m2, ofrece un entorno de paz y relajación con vistas parciales al mar. Está completamente vallada, tiene un gran portón eléctrico de entrada y varias plazas de aparcamiento junto a la casa, lo que garantiza comodidad y seguridad.
Con un total de 167 metros cuadrados construidos, el interior de la vivienda, renovado hace unos años con gran atención al detalle, se distribuye en una sola planta. La casa cuenta con 4 habitaciones, dos baños, un amplio salón con cocina americana totalmente equipada, un despacho, un patio luminoso y una pequeña sala de fitness. Todas las ventanas son de doble acristalamiento, lo que mejora el aislamiento térmico y acústico.
En el exterior, la propiedad ofrece un espacio adecuado para disfrutar de barbacoas al aire libre. Además, los propietarios pueden ofrecer a sus amigos cercanos la posibilidad de pernoctar en su propia caravana dentro de la finca. Los amantes del senderismo también encontrarán aquí su recompensa, con rutas cercanas que les permitirán explorar la belleza natural de la zona.